El cuestionario de System Action: Sophie Aguilera, artista y escultora

El cuestionario de System Action: Sophie Aguilera, artista y escultora

Jul 29, 2025
  • Empecemos por el principio… ¿Cómo empezaste a trabajar con cerámica?

Siempre quise dedicarme a algo creativo. Estudié Bellas Artes y, en un primer momento, me decanté por la escenografía y la dirección artística. Trabajé varios años como asistente de vestuario y atrezzo en producciones teatrales; además, tuve la suerte de
colaborar con compañías tan reconocidas como Dagoll Dagom, donde aprendí
muchísimo. 

En plena crisis financiera y por motivos personales, me trasladé a Madrid. No tenía trabajo en ese momento, así que empecé a ir al taller de mis tíos, que son ceramistas profesionales. Hasta entonces había trabajado con barro, pero desconocía el oficio. 

Fue entonces cuando descubrí un material versátil y noble que me permite una infinidad de opciones tanto estéticas como creativas. La cerámica es exigente y requiere compromiso, es una carrera de fondo que te dota de paciencia pero a la vez te nutre de curiosidad. Es además, un material de oficio, por lo tanto comparto carrera y conocimiento con artesanos y alfareros, alejándolo de esta manera, de la superficialidad y los grandes egos del arte contemporáneo. La cerámica te requiere ser humilde, y eso me gusta.

 

  • ¿Qué te inspira a la hora de crear tus piezas? ¿Tienes alguna pieza favorita?

Mi pieza favorita siempre es la que está por venir, porque encarna la posibilidad y eso es siempre emocionante. Pienso que la inspiración y la creatividad se entrenan y se cultivan cada día. La obra de uno tiene que ver profundamente con la observación y con el bagaje estético que cada persona ha construido: su historia personal, sus vivencias, sus afectos y desafectos. 

Todo eso se transforma en materia creativa, en una manera particular de ver y traducir el mundo. En mi caso me puede inspirar un libro, un poema, una imagen cautivadora o un recuerdo.

 

  • ¿Cómo es un día normal en tu estudio?

No soy muy madrugadora, por lo que suelo llegar al taller entre las 10 y las 11. Comienzo planeando las tareas de la jornada, que pueden variar entre trabajo administrativo, contestar a clientes, producción de obra o trabajo más físico, como cargar y descargar hornos o reciclar barro. Los tiempos de la cerámica son muy específicos, por lo que cada etapa requiere su propio ritmo. Algo que hago religiosamente cuando me voy del taller es dejarlo todo limpio y recogido. 

No hay nada que me dé más placer que llegar a un espacio limpio y ordenado, donde puedo empezar a trabajar mejor. El amor por el espacio es fundamental para mi proceso creativo.

 

  • ¿Qué estás preparando ahora o cuál es tu próximo proyecto?

Actualmente estoy trabajando en una colección de piezas nuevas para dos exposiciones que tendrán lugar en otoño. Una de ellas será en París, lo cual me tiene muy ilusionada.

 

  • ¿Hay algún artista o movimiento que te haya marcado especialmente?

Hay muchos artistas que me inspiran y han influido en mi trayectoria, pero quienes más me motivan y marcan son mis propios compañeros de profesión. Procuro rodearme siempre de personas cuyo trabajo admiro y cuyo talento valoro profundamente. Observar cómo trabajan, la constancia que mantienen y la dedicación que ponen en cada proyecto me impulsa a superarme continuamente y a crecer como artista. Creo que el intercambio y la convivencia con otros creadores son fundamentales para enriquecer el propio proceso creativo y mantener viva la motivación por mi trabajo. 

Esta es una carrera difícil, llena de desafíos y frustraciones, y compartir la experiencia con otros artistas ayuda mucho a enfrentarlos y a encontrar apoyo mutuo en el camino.

 

  • ¿Qué te gustaría que sintiera alguien al ver una de tus piezas por primera vez?

Me gustaría contribuir a su experiencia estética. Deseo que mi trabajo provoque una conexión sensible, que despierte curiosidad o una conversación. La belleza tiene un lugar central en mi práctica, no como algo superficial, sino como una forma de resonancia, de encuentro entre la obra y quien la observa.


 Preguntas comunes

  • ¿Has tenido alguna experiencia embarazosa debido a la elección de tu outfit?

Ahora mismo no me viene nada a la cabeza. Lo que si me pasa a menudo es que voy siempre llena de barro y de polvo, pero no tengo más remedio que vivir con ello. A veces echo de menos tener un trabajo donde poder ir elegante, pero no es el caso. Al taller tengo que ir siempre cómoda y con ropa que se pueda manchar.

 

  • ¿Cuál es la prenda de ropa más antigua que tienes y aún no has tirado?

Un top de lentejuelas turquesas de los años 70. Es una prenda de ropa que pertenecía a mi madre y me encanta.

 

  • Un estilo con el que te sientas (muy) identificada

No sé si tengo un estilo definido. El color, los estampados florales, unas telas naturales como el lino o el algodon me encantan. Para mí, lo importante es que las piezas estén bien hechas, con materiales de calidad y cuidando cada detalle. Creo que el estilo es esa mezcla de forma, color y textura que hace que algo se vea único y, al mismo tiempo, funcione bien para el día a día. Además, considero que el estilo constituye una manifestación tangible de la identidad personal, un lenguaje visual a través del cual se comunica de manera sutil pero poderosa la esencia del individuo.

 

  • ¿Qué cambios te gustaría ver en la industria de la moda? ¿Eres de las que analiza lo que compra o te dejas llevar por el fast fashion?

Cada vez analizo más lo que compro. Me interesa la moda que tiene procesos honestos detrás, que respeta los tiempos y los materiales. Como ceramista, valoro lo hecho a mano y lo duradero. Me encantan las cosas bien hechas. 

En cuanto a la industria, me gustaría que hubiera más transparencia y menos presión por cambiar de ropa cada temporada. Vienen cambios legislativos importantes en cuanto al reciclaje de todos los desechos industriales que produce el sector, y creo que esto será un cambio de paradigma significativo. Creo que veremos investigaciones creativas en torno a nuevos materiales sostenibles que abrirán caminos fascinantes para transformar desechos en recursos valiosos, impulsando una industria más responsable y respetuosa con el medio ambiente.

 

  • ¿Qué te pones, por ejemplo, para ir al taller?

Algo cómodo y que no me importe manchar. Normalmente pantalones amplios, una camiseta básica y un delantal de lino.

 

  • Fin de semana o vacaciones: ¿Prefieres conducir o que te lleven?

¡Que me lleven! Soy de las que me saqué el carnet de conducir mayor y me gusta muy poco conducir. 

 

  • Cuando te vas de viaje: ¿Eres de hotel o de apartamento? 

Por principios prefiero alojarme en un hotel. Viviendo en Barcelona, soy testigo directo de la tensión habitacional que provocan los apartamentos turísticos, por lo que trato de evitarlos siempre que viajo.